En estos 39 años de servicio como portero de la escuela N° 415, el Sr. Alejandrino ha compartido muchas vivencias, emociones, anécdotas y recuerdos, con alumnos, maestros, directores, tutores y durante su función ha cosechado amistades que lo llevará en su corazón y lo fortalecerá como gran ser humano que es, y tendrá la paz por el deber cumplido. 

Los directivos, maestros y colegas les brindaron anoche un emotivo acto de despedida al que asistieron el intendente Nino Portela, el rector de la Escuela Técnica Prof. Ramiro Quintana; la coordinadora Sra. Virginia Bernardis; directora del Centro de Educación Física N° 20 Prof. Julia Grenz; la coordinadora del Instituto Superior de Formación Docente, Ana Medina. Maestras jubiladas: Manuela Zalazar; Miriam Scotto, Lili Godoy, Lidia López, Pura Ramírez, Gladis Corrales y el maestro Adolfo Sosa, personal de Gendarmería familiares del agasajado, alumnos y público.

La directora del establecimiento Prof. Sandra Billordo, junto al cuerpo de docentes hicieron entrega, de una medalla recordatoria por su trayectoria y labor prestada a la escuela. También los porteros: Cristina; Rosa; Antonia; Ramón y Pablo le obsequiaron un presente.

Al hacer uso de la palabra el maestro Miguel Navarro destacó: “Después de todo debemos reconocerte como nuestro compañero de trabajo, nos has ayudado a madurar, a contemplar la vida con una perspectiva más exacta”.

“A vos nuestro querido portero, nuestro hermano y compañero, nuestro amigo, te agradecemos  tu colaboración, en una palabra tu compañía”. 

La maestra jubilada Pura Ramírez, también dirigió unas palabras, recordando su paso por la escuela y momentos compartido con Alejandrino.

A su turno cuando habló Alejandrino señaló: “Me siento contento por un lado, porque ahora voy a descansar, pero por otro lado triste por que voy a extrañar mí trabajo, mis compañeros y maestros. Fueron tantos años y a la escuela lo considero como mi segunda casa, porque me recibieron con los brazos abierto, me atendieron muy bien y la comunidad de Itá Ibaté me adoptó como un hijo de este pueblo”.    

Recordó su primer día diciendo: “Soy de una localidad llamada Loma Alta, departamento de General Paz, llegué por primera vez a este pueblo un 23 de octubre 1973, a la once horas, en el colectivo Ciudad de Posadas, me recibieron los maestros Toté Yaguedú y Toté Esquivel, quienes me llevaron a la dirección y me presentaron a la directora Beatriz Portela de Hadad”. También comentó que estuvo sin cobrar seis meses y no tenía nada para comer. “Las maestras me ayudaron mucho, me daban de comer, una semana una, y después otra, mencionando a las docentes de esa época Manuela Zalazar “Chochohita”; María Esther Breard: Beatriz Portela “Chochó”; Amine Saich, Miriam Scotto” Agradezco a esas docentes infinitamente por todo los que me brindaron y a la gente por cobijarme, ya que soy uno más de aquí, tengo mas años de vida en Itá Ibaté, que mi propio pueblo”

Finalizado el acto, continuó con una cena, y la actuación de varios artistas: Tadeo Moran; el dúo Pablo Gómez y Miguel Navarro, y un grupo de Caá Catí.

También la emoción, las anécdotas  y los recuerdos fluían en el ambiente. La docente Miriam “Rubia” May Scotto habló en estos términos: “Hoy Alejandrino me toca despedirte en nombre de las tres generaciones que han compartido con vos esta hermosa tarea que es estar con los niños en su educación y crecimiento, con días buenos y algunos no tanto, pero siempre al frente”.

Se que mamá tenía intenciones de decir algunas palabras por ese tiempo compartido no solo como portero de la escuela N° 415, sino como un amigo el compañero, pero no se anima y le pone un poco melancólica al recordar  a esa barra que incompleta ya está y por lo tanto me pidió que lo haga yo. 

Al finalizar la fiesta, la Directora Prof. Sandra Billordo comentó a nuestro medio “Me siento emocionada y muy contenta por nuestro portero Alejandrino Benítez, porque después de dedicarse 39 años a la escuela ahora tiene más tiempo para él, para dedicarle a su familia. Le deseo lo mejor, éxito en la vida y en lo nuevo que pueda emprender ahora”

“Alejandrino deja la escuela, pero va quedar el recuerdo de su paso por este establecimiento, porque ha dejado parte de su vida. Nosotras lo vamos a extrañar, porque él era como un hermano, porque la escuela es una gran familia”.  

 Alejandrino, gracias por formar parte de nuestra historia, de nuestra enseñanza y gracias por tu Amistad  

   HASTA SIEMPRE……