El acto comenzó con las palabras del profesor Felipe Zacarías, docente de la cátedra Lectura y Escritura Académica, luego de la coordinadora Profesora Licenciada Laura Frada.

LOS  RELATOS

 Felipe Agüero “Trapiche”

El Señor de las Serpientes: Constancio Barrientos

Un amor en tiempos de cosecha: Antonio Ayala – Juana Romero

Buey Cáceres

Festividad de la Virgen de los Remedios y San Roque

Las Manos en un Arte de Oro y Plata: Felipe y Alejandro Domínguez

Chelino, el último lector

El Pombero.

"El Villar : La  diversión del pueblo"

"Doña Mary: La héroe del pueblo"

Chofray : "El hombre de los rayos"

El caso de Felipe Avalos,  Por   Catalina Cuenca

El Hospital antes tuvo un dueño misterioso: Luis Altamirano

La Dictadura  Militar

El misterio del pocito

PALABRAS DEL PROFESOR FELIPE ZACARÍAS

Hoy es un día muy emotivo para los chicos de 1º año que están cursando la carrera de Historia, extensión áulica de Berón de Astrada, ya que pese de haber trabajado un buen tiempo, más de un par de meses hoy se concreta trabajo que prácticamente pasó a ser el eje esencial de la cátedra.

Son 18 relatos inéditos y un pueblo testigo, el titulo que se eligió para este proyecto, en su comienzo tuvo varios objetivos, de los cuales solo voy a mencionar tres, ya que prácticamente fueron los ejes transversales que nos guiaron en este gran trabajo.

El primero de ellos consistió justamente trabajar un poco con aquellos relatos que de cierta manera se trasmiten exclusivamente en los espacios de la oralidad, a esto le agregamos el tiempo y la memoria.

Y si hablamos de esto justamente Berón de Astrada hoy ya tiene 250 años. Esto quiere decir, que verdaderamente tiene algo que contar y tiene, desde mi punto de vista mucho que contar.

El proyecto no fue pretensioso, por lo tanto se eligió un número par, 18 relatos, esto también significa que aquí en Berón hay mucha mas historias, por lo tanto creo que este trabajo se funda básicamente en la base, en el pie de lo que podría ser a futuro otros trabajos, otras producciones ya sea desde el Instituto o también desde las distintas áreas de nuestro sistema educativo aquí en el pueblo.

El segundo objetivo, que también es de gran trascendencia, es el ejercicio de la escritura, en estos tres meses, los estudiantes se dieron cuenta que escribir no es fácil, y más cuando manejamos ciertos contenidos, cierta información, que nos proviene netamente de la oralidad.

Ya que muchos intelectuales afirman que todos aquellos que se trasmite en la lengua cotidiana, en el habla de todos los días pasa a ser casi informal y no nos constituye, no nos forma. Sin embargo en los pueblos del interior se demuestra todo lo contrario.

Esas historias y muchas más nos identifican como pueblo, nos hace uno en relación a los otros.

En un breve  texto a modo de introducción en el trabajo escribo lo siguiente: En Berón no hay nada que inventar porque todo lo tenemos en la realidad, yo creo que eso es una aseveración prácticamente.

Cuando muchos escritores, cuando muchas personas de la letras tienen un trabajo incansable casi cognitivo o intelectual para lograr trabajos desde la imaginación, aquí en estos lugares se puede hacer perfectamente sin llegar a esos esfuerzos grandes, porque todo es real. 

Y para demostrar esto quiero mencionar un mero ejemplo. Existió un hombre llamado Alejo Carpentier, vivió mucho tiempo en la Argentina. Este hombre empezaba a leer relatos en la Argentina, pero relatos que le provenían de Europa, llegado un momento consigue un buen dinero y se dirige hacia aquellos lugares a encontrar justamente aquellos que leía.

Cuando ya con un grupo de amigos conversando y estando ya en Europa paseando un poco por España, Italia, Francia, haciendo esa recorrida pregunta ¿Dónde está todo aquello que yo leo allá en la Argentina?

Los amigos responden, eso no existe porque todo lo inventamos. Fue una gran desilusión para este hombre. Que estoy haciendo en Europa buscando relatos que no existen. Cuando yo en la Argentina, cuando yo en Latinoamérica lo tengo todo eso en la viva realidad, es decir 

En Argentina yo tengo hombres que se transforman en lobos y son lobizones. En Argentina yo tengo hombres o mujeres que se transforman en aves y tenemos nuestro Carau y tenemos nuestra pollona. En Argentina tengo duendes que la gente, según cuenta han visto y tenemos a nuestro famoso Pombero.

Este trabajo demuestra justamente eso. En 18 relatos inéditos y un pueblo testigo, no estamos solos, hubo un gran equipo, todos los profesores de la Formación Docente y también los protagonistas esenciales de este trabajo, los chicos del primer año, a quienes agradezco inmensamente.

En primer lugar a todas esas personas que nos cobijaron en sus casas y de cierta manera nos dieron su tiempo para lograr concretar lo que fue las entrevistas, que fue de cierta manera el método que hemos elegidos para obtener estos relatos.

Asimismo al equipo de profesores cada uno brindó su especio, no quiero nombrarlos porque de seguro me olvidaré de algunos, pero en especial también a la Licenciada la Profesora Laura Frada por confiar en el grupo y de cierta manera ser que hoy este evento se haga de esta manera.

El trabajo como bien dije llevó un tiempo prudente y el tercer objetivo fue trabajar con la memoria, todo aquello que contamos y que manejamos casi colectivamente como ciudadano del pueblo hoy gracias a este pequeño trabajo lo tenemos en el formato escrito, eso significa que puede perdurar unos años más, quizás un siglo o más.

Entonces más que nada mis agradecimientos reitero a todas las personas que colaboraron con nosotros.

En suma y en resumida cuentas, el trabajo va ser evaluado, va ser enviado a un concejo que conforma nuestro instituto, una vez realizado este proceso y estos pasos, pues el objetivo es lograr de cierta manera alguna obra, que a futuro sea un libro para nuestro pueblo.

Si más que agregar espero que comparta con nosotros algo extraordinario y menciono esto: Muchas veces estamos acostumbrados a que nos pidan que nos lean o mejor dicho, según las situaciones en la que vive cada uno está acostumbrado a leer.

Sin embargo hoy quizás vamos hacer un poquito la inversa, vamos a prestar nuestros oídos para que los chicos del primer año nos lean, porque estos relatos, si bien todos tuvieron un tratamiento, fueron escritos para ser escuchado. Sin más que agregar Buenas noche.