La colecta comenzó la semana pasada, con el aporte de los padres y docentes del Jardín El Patito Feo, el Colegio Del Sagrado Corazón, y de los Institutos Monseñor Roubineau y Superior San José, y se traslada también a toda la barriada a fin de comprometer a los vecinos y comerciantes de la zona con su aporte para este gesto solidario.

“Estamos muy agradecidos por esta iniciativa de ayudarnos, como lo están haciendo otras instituciones y el gobierno de la Provincia. La verdad es que necesitamos de todo, principalmente libros de texto para el nivel secundario”, remarcó la profesora Iturria esta mañana, durante la reunión que mantuvo con los directivos de los colegios católicos, en el salón de usos múltiples del nivel primario.

El establecimiento cuenta con 500 estudiantes en ambos turnos y con el siniestro, perdieron todo el material de la biblioteca, de la secretaría y de la rectoría.

“Lo más urgente, son los libros para los chicos”, reiteró la rectora. Además de libros de texto, novelas y enciclopedias, se precisan elementos de geometría para el pizarrón, mapas láminas, carpetas para legajos, elementos para educación física como pelotas y colchonetas; cajas organizadoras, cortinas para los salones, vasos térmicos o descartables para servir la merienda a los chicos, en otros.

Los alumnos del Instituto Roubineau ya se organizan para visitar junto con los docentes a los vecinos, a comercios y oficinas públicas cercanas. De esa manera, promueven una movida importante que vincule a la familia, a la escuela y a la comunidad.

Este miércoles, los chicos del Colegio Piragine Niveyro vuelven a las aulas, por lo que se puso como fecha límite para la colecta, el viernes 10 de abril. Todos están invitados a participar.