“Vinimos a compartir nuestra experiencia, porque ya hace más de un año que estamos trabajando en esto y en Caá Catí nos está dando buenos resultados. Queremos colaborar con los chicos de Tránsito de acá y trabajar juntos en la calle”, indicó Panczak.

“Santa Rosa tiene un cruce de ruta muy peligroso, es una Ruta Nacional que corta el pueblo en dos, pero todo depende del buen comportamiento de la gente y la presencia del inspector en la calle, así como la presencia de los policías ante cualquier eventualidad”, evaluó en declaraciones radiales, al tiempo que precisó que en Caá Catí se propusieron un objetivo a comienzo del mes de octubre del año pasado, con plazo hasta enero.

Hicieron trabajos de prevención, y de enero a la fecha ya labraron 500 actas de infracción de las 430 fueron abonadas por el infractor, mientras que el resto están siendo juzgadas por el Juez de Faltas. En función de ese trabajo, dijo que lograron normalizar el uso del casco obligatorio en un 60%.

“El casco salva vidas, es así, siempre hay que llevarlo puesto cuando sale a la calle en motocicleta”, resaltó e insistió en que todo conductor debe circular con casco obligatorio, cédula verde, patente y seguro. Asimismo, llamó a la conciencia de los padres que regalan motocicletas a sus hijos menores de edad. “Es como darle un arma de fuego”, advirtió, a la vez que ratificó su predisposición de trabajo coordinado entre las localidades de Caá Catí y Santa Rosa.