La actividad, que la desarrolla el Departamento Apicultura dependiente de la Secretaría de Valor agregado y Competitividad Agropecuaria de la cartera productiva, ya se realizó en Monte Caseros, Goya, Esquina, Bella Vista, Saladas, Paso de los Libres, Santo Tomé, Colonia Liebig, Ituzaingó y Loreto.

Los acaricidas, que son utilizados para eliminar, controlar o prevenir la presencia o acción de los ácaros mediante una acción química, fueron distribuidos inicialmente entre unos 120 productores y continuarán siendo entregados en los próximos días en las localidades que aún restan llegar. Con esta asistencia se logró llegar a casi 10 mil colmenas y se busca comenzar a trabajar de manera conjunta con los productores apícolas para que puedan obtener mayores beneficios y ganancias.

Los productores aseguraron que la apicultura en la provincia no se vio ajena a la afección de los cambios climáticos, como ocurrió en todo el sector productivo. La situación está afectando directamente a la producción apícola y los productores perdieron su capacidad productiva a causa de la sequía y los incendios.

Acompañamiento

La secretaria de Valor Agregado, Verónica Storti, junto a su equipo de trabajo, conversaron con los productores para ver sus necesidades y trabajar de manera articulada para mejorar la producción y las ventas de miel. En tiempos de normalidad productiva, en promedio, por colmena se pueden extraer entre 20 y 25 kilos de miel.

Storti manifestó que fue el propio ministro de Producción, Ing. Claudio Anselmo, quien tomó la decisión de financiar esta acción sanitaria que permitirá preservar las cuencas apícolas. Y agregó: “el gobernador Gustavo Valdés nos pidió un relevamiento total del sector que nos permitan la toma de decisiones en cuanto a planes y programas, para acompañar y reimpulsar al sector apícola en Corrientes y a eso estamos abocados”.

Roberto Prieto, técnico del Departamento de Apicultura, resumió la situación: “La falta de lluvias, sumado a los incendios y la pandemia provocaron la disminución de la producción y el pedido de ayuda de los productores que están siendo asistidos por el Ministerio de Producción”. “La preocupación de los apicultores ronda en que aún no se logran recuperar de las inundaciones del año 2017 y ahora están sufriendo las consecuencias de la sequía y los incendios en todo el territorio provincial”, destacó Prieto.

En este escenario, la necesidad de los productores tiene que ver con la carencia de material vivo a campo y la activación de algunas salas de extracción en varias localidades donde se necesitan maquinarias. Por ello, desde el Departamento de Apicultura trabajan junto a los productores para sostener la actividad productiva apícola en la provincia.

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